sábado, 30 de noviembre de 2013

Un mesecito de descanso, por favor :)

Ya iba siendo horas de descansar en casa, bajar a cenar los fines de semana a algún restaurante y quedar con los amigos para tomar unas cervezas... El mes de noviembre se puede resumir así.



Y es que tanto viaje acaba por hacerte valorar más el tiempo que pasas en casa tranquilo: no se ven cosas nuevas, pero el cuerpo descansa. Así que durante todo el mes de noviembre nos dedicamos a eso: relajarnos.


Como a principios de noviembre es el cumpleaños de Saraí, invitamos a varios de nuestros amigos a comer algo típico mexicano en casa y pastel. Aprovechamos para invitar a algunos compañeros: Antonio y Óscar (del instituto), Manuel y Zoila (los compañeros de Vigo), Isa y Lenka (ex-compañeras del insituto) y unas compañeras que conoce Saraí... Vamos, la gente suficiente para pasar un rato en casa tranquilos y disfrutando.


El resto de los fines de semana aprovechamos para seguir conociendo restaurantes y lugares en los que salir por la noche: pizzería La Scala, pub Morgan's, 818 restaurant (con muy buenas vistas de la ciudad), restaurante japonés Miomi, restaurante U-Andela, restaurante The Crack, restaurante Caesar, restaurante Viktoria, Činská Restaurace, el pasadizo de los pubs... Vamos, lo que se dice estar quieto pero no parar.


El día 24 de noviembre encendieron las luces de Navidad en la Plaza y como parece ser que es todo un acontecimiento ahí nos fuimos con Manu y Zoila para ver el evento. De lo poco que entendimos del discurso, la cuenta atrás: deset, devět, osm, sedm, šest, pět, čtyři, tři, dva, jedna... y se hizo la luz. Muy bonito espectáculo de luces y con todos los puestos de madera, el ambiente era más que acogedor. Eso sí, desde que llegué nunca había visto a tanta gente en Horní náměstí (la Plaza)... bueno, ni en ningún otro sitio de Olomouc.


Pero lo que realmente nos sorprendió fue la bebida típica de la navidad, el 'punč' (ponche): vino caliente (muy caliente), con algún tipo de alcohol (ron, vodka...), frutas (piña, naranja...) y algunas uvas pasas... Una cosa había garantizada: frío no ibas a pasar aunque estuvieses en la calle a -10ºC.


Y ese debe de ser el motivo por el cual todo el mundo estaba tomando el famoso 'olomoucky punč' en la calle. Entre otras cosas porque, con muy buen criterio, los locales en los que lo vendían no dejaban que lo consumieses dentro.


Y ya, de descanso ya había llegado, es más, ya habíamos visto lo que queríamos en Olomouc: las luces de Navidad encendidas. Estaba claro que, hablando de luces de Navidad, nos faltaba un sitio en el que, seguro, la iluminación era excelente.

Así que, a próxima entrada: Praga no Nadal.